Hjalte,
Un chico para elogiar.
Muchos sabemos que en el mundo entero hoy hay miles de estudiantes de intercambio, pero también sabemos que si es un estudiante de un país avanzado es un tanto difícil que elijan países que no lo están para hacer su experiencia.
Fue así que en el mes de Agosto de este año 2009 llego a Centeno, un poco por casualidad, otro poco por decisión un estudiante oriundo de Dinamarca que había elegido Argentina para su experiencia de Intercambio, entonces, el pueblo , la familia anfitriona y la escuela principalmente nos vimos entusiasmados con su visita por muchas razones, la más evidente creo, es que no llegan al pueblo muchos extranjeros y la curiosidad de mi pueblo chico hizo que Hjalte fuera algo para conocer, estudiar, admirar y cuanto calificativo encontremos para lo que resumiendo fuera curiosear. Asistió a la escuela regularmente donde pudimos tener todos una comunicación fluida con él, su español cuando llego apenas le permitía decir un par de palabras, Su Inglés es excelente, por lo tanto con quienes hablábamos inglés se sentía cómodo pero siempre tuvo claro que aprender español era su prioridad, puso empeño y voluntad, avanzó a pasos acelerados y en dos meses entendía perfectamente y hablaba bastante, curioso, ávido de aprender cultura, hábitos, costumbres de nuestro país, Hjalte compartió con nosotros un par de meses y luego fue a terminar su experiencia en la provincia del Chaco, en la localidad de Sáenz Peña. Donde hoy seguramente está conociendo un poco mas de nuestro país.
Hjalte es un chico encantador, estudioso, inteligente, responsable, cabal y muy ubicado, con mucho sentido común, sabe que quiere y adonde va. Es una persona de mente abierta que ha sabido tomar decisiones correctas a pesar de sus 16 años, bueno..17, ya que celebro su cumpleaños aquí. Los jóvenes de Centeno fueron atentos, correctos, considerados y pacientes con él, lo animaron a integrarse a la comunidad fuertemente. Este comentario de hoy es para señalar que no todos los jóvenes, y eso alrededor del mundo piensan igual, hay jóvenes que saben lo que quieren y que van al encuentro de su futuro. Este Chico danés es un ejemplo de ello. Bravo por él, que representa a los muchos que están dispuestos a llegar a un mundo extraño y lejos de asustarse y suspirar o añorar su tierra, abren en la tierra que los alberga la ventana que nos comunica con otras sociedades .
