martes, 24 de mayo de 2011

Mi Lago de Ebano

Mi Lago de Ébano.
Brillaba con asombrosa nitidez cuando los rayos del sol aparecían temprano en el horizonte, seguía brillando al mediodía y aun en el ocaso tenía ese tinte envidiable del negro infinito con destellos de azul y aun reflejos dorados. Era la fantasía hecha realidad, El cerco de grava del lado norte no impedía que se filtrara aun un poco más allá de los guijarros y mas acá el borde natural del yuyal tampoco impedía que inundara las raíces de aquellos que se habían salvado de la primera embestida de mi lago de ébano. Era según mis ojos de niña, inmenso, misterioso, profundo y en sus recónditos horizontes aun lejanos, peligroso. No te acerques, te va a tragar decían los chicos que nos reuníamos para jugar en ese campito detrás de la vía.
Sin embargo, el secreto que mi lago de ébano insinuaba, me invitaba a contemplarlo de cerca, me excitaba la idea de sumergirme en el. Entendía que estaba prohibido, conocía que mi lago era temible pero lo sentía mío, por las noches lo pensaba, lo imaginaba y le regalaba mi último pensamiento aun a costa del padrenuestro que prometía a mi abuela dedicarle a mi Jesús de las buenasnoches. Sabía que al día siguiente y después de la escuela nos reuniríamos para jugar a los Cowboys al lado de mi lago. Los disparos de los revólveres de juguete y las huidas de los ladrones más perversos de la historia hacían que el misterio del lago fuera testigo de aquellas tardes de precoz adolescencia o tardía niñez. A veces me apuraba y el tomar la leche se hacia una obligación que pretendía urgente, “Me esperan los chicos” decía, pero llegaba antes que ellos y lo contemplaba absorta y embelesada, a solas, en silencio y me sumergía con mis pensamientos en el profundo y espeso liquido. ¿Qué habría en la profundidad? ¿ Quien sería tan valiente como para navegarlo? ¿ Que embarcación sería tan brava como para surcar sus aguas oscuras? ¿ Y si me internaba en el….y me absorbía...Quien sería el héroe que me rescataría de aquel abismo? Pero no, el no me lastimaría, yo lo admiraba tanto que no se atrevería. Y en mi fantasía soñaba que me abrazaba y accedía a que me internara en su misterio y conociera el propósito de la vida. Y fue así que disfruté de mi propio lago de ébano durante el tiempo en que creía que todo estaba ahí dentro y si me internaba en el conocería el significado de lo que todavía en mis años jóvenes no podía entender.
Una tarde llegamos como siempre con la cofradía de ladrones, sheriffs y cowboys legendarios que imitaban a Jesse James y vimos con desconcierto que camiones inmensos habían rodeado a mi lago. Qué horror! que infortunio infinito! esos camiones que a mis ojos parecían ogros, llegaron decididos a matar a mi lago. Eran dos camiones que con bombas y mangueras aterradoras absorbieron el misterio de mi laguna de ébano. Los vehículos bombearon durante poco tiempo que a mí me pareció eterno y en cuanto nos dimos cuenta el lago había desaparecido. ¿Por qué? ¿Que había hecho mi lago para que esos camiones se lo llevaran? ¿Quien me devolvería mis sueños? ¿ A Quien le dedicaría mis últimos pensamientos de mis noches sin padrenuestros?
Mi lago de ébano se fue en esos camiones que consumieron todo, hasta los guijarros del lado norte y el pasto de más aca.Nunca supe donde vertieron mi fantasía. El tren que derramo el petróleo por accidente una mañana en el campito de la vía tiempo atrás, volvió a pasar como siempre y la lluvia se llevo los restos de mi lago que solo dejo una suave línea en las orillas, testigo de que una vez hubo allí un charco al que yo llamaba lago. Ya no volví a soñar con navegar su oscuridad y tampoco a preguntar el sentido de nuevas cosas que la vida se encargo de enseñarme con el tiempo.
Eran épocas en que la contaminación era una palabra que no se había inventado en nuestro vocabulario y las cosas fantásticas que sucedían en mi pueblo eran ocasionadas por apariciones misteriosas de almas en pena o luces malas en los campos. Mi alma de niña que aun recuerda esas vivencias, preserva el recuerdo de aquel estanque de ilusión y misterio que será eterno y que alimento mi imaginación y mis ansias de volar.